Residuos electrónicosEl pasado 20 de febrero, entró en vigor el nuevo Real Decreto 110/2015, sobre residuos de aparatos eléctricos y electrónicos (RAEE), que establece una regulación marco para este tipo de residuos.

Uno de los aspectos innovadores de esta normativa, es su enfoque sobre la necesidad de prevenir la generación de RAEEs mediante su reutilización. De modo que introduce el concepto de preparación para la reutilización de RAEEs a lo largo de todo el texto, detallándolo en el artículo 30 y en el Anexo IX “Requisitos técnicos para la preparación para la reutilización” del Real Decreto. Este ámbito de la reutilización, además va en consonancia con el principio de jerarquía de residuos de la Ley 22/2011 de Residuos y suelos contaminados.

Uno de los aspectos esenciales de este Real Decreto, es la introducción de los centros de preparación para la reutilización (CPR) de RAEEs, que se encargarán de realizar las labores de verificación, segregación, reparación y limpieza de estos residuos. Se trata de una nueva tipología de instalaciones en el ámbito de los gestores de residuos, con un gran potencial de desarrollo.

En el Anexo IX, el Real Decreto especifica los Requisitos técnicos para la preparación para la reutilización y especifica que estos centros deberán cumplir las siguientes condiciones:

  • La instalación eléctrica deberá contar con:
    • Potencia suficiente para comprobar todos los aparatos.
    • Enchufes de una capacidad suficiente para soportar el consumo de una placa de cocina (mínimo 20 amperios).
    • Amperímetros para conocer el consumo de los aparatos.
    • Enchufes protegidos por diferenciales, para detectar fugas eléctricas.
    • Magneto-térmicos para conocer consumos excesivos o cortocircuitos.
  • Las zonas de pruebas de aparatos:
    • Contarán con grifos independientes en cada una de ellas.
    • Se recirculará el agua usada en las pruebas con fines ahorrativos de este recurso.
    • Estarán preparadas para evitar accidentes de derivación en caso de fuga de agua.
    • Estarán impermeabilizadas para evitar lixiviados.
  • En cuanto a las herramientas que deben poseer:
    • Dispondrán de aparatos de medida que garanticen la seguridad y buen funcionamiento de los aparatos. Medidores de temperatura, audio, revoluciones y de fugas de los microondas.
    • Asimismo para evitar esfuerzos y dolencias en el tiempo, las herramientas serán principalmente eléctricas y contarán con diferenciales, amperímetros y magneto-térmicos portátiles.
  • El personal contará con un equipamiento de seguridad compuesto por un uniforme de trabajo, calzado de protección ante riesgos eléctricos, guantes de seguridad, gafas para soldadura o contra el polvo, mascarillas y otros requerimientos que se establezcan en la evaluación de riesgos laborales

La importancia de estos centros, radica en que una vez acabada la preparación para la reutilización, los RAEE pasarán a ser aparatos eléctricos y electrónicos (AEE) o componentes recuperados. De esta manera se prolonga la vida útil de estos equipos, evitando la generación de residuos y protegiendo el medio ambiente. Esto además supone un impulso para la implantación y desarrollo de los comercios de segunda mano en este ámbito.

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